sábado, 19 de enero de 2013

Evolucionamos en la prehistoria

La evolución humana es muy compleja. Ha habido muchas especies en el planeta que fueron víctimas del proceso complejo del "ensayo-error". Eso quiere decir que unas lograron evolucionar hasta llegar a convertirse en otra especies, mientras que otras fracasaron en su intento evolutivo. 
A lo largo de la larga Historia Natural de este planeta han vivido más de 6.000 especies de primates, de las cuales, la gran mayoría se han extinguido. En nuestros días existen alrededor de 120 especies. Entre lo que se conocen familiarmente como primates hubo muchos elementos comunes. Algunas de estas especies ancestrales se desarrollaron y evolucionaron convirtiéndose en eso que hoy llamados “popularmente” como monos, mientras que otras de este especies – posiblemente con un antepasado común- tuvo otra vía evolutiva que dio lugar con el tiempo a esta especies que hoy llamado humana. En los yacimientos paleontológicos y arqueológicos han quedado muchos restos óseos , a veces fragmentados, y , a veces, muy fragmentados que hablan de un proceso evolutivo que no responde gráficamente a lo que pudiera ser una simple escalera, sino más un árbol evolutivo con muchas ramificaciones. De un tronco común surgen diversas ramificaciones. De esas ramificaciones habrían aparecido diversas especies de homínidos, de los cuales alguno manifestaría bipedismo. Se sabe que este primer bípedo conocido apareció en la zona Este y Sur de África, hace unos cuatro millones de años. Sería parecido a lo que nosotros identificamos hoy con los simios, pero con rasgos humanizantes como el bipedismo, la posibilidad, por ello de asir, y que a la larga le daría una mayor capacidad cerebral con todo lo que eso significa. Con la posibilidad de asir podemos descubrir un nuevo ser que trabaja con sus manos, el homo habilis. Luego este homínido pasó del continente africano al asiático, siendo su primera visita, posiblemente el Oriente Próximo y Medio, y de allí al Continente Europeo. En esos pasos descubrimos al Homo ergaster – el viajero- y al Homo Erectus , el que ya camina erguido.
De esta rama posiblemente surgirían los Homo sapiens , manifestándose como Homo Antecesor , inicialmente, y más tarde, dividida en dos familias de Homos que convivieron en el tiempo y en el espacio: los Homo neanderthalis ( Hombres de Neanderthal) y los Homos Sapiens Sapiens, o sea, nosotros. Y hasta aquí hemos llegado.




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